Seguimos…..

Sensación agtidulce, alegría con regustillo a dolor, rabia y miedo.
 
Como cuando te pillas un dedo con una puerta un rato y luego lo liberas.
 
Como una gastroenteritis aguda cuando se pasa.
 
Como cuando despiertas de una pesadilla.
 
Alivio, alegría y euforia por encontrarte bien; pero en realidad sólo has recuperado la normalidad; porque lo que no era normal era lo anterior.
 
Pero no nos confundamos, ni la pesadilla ni la enfermedad han terminado: la pesadilla de una niña seguro que va a tardar mucho tiempo, y la enfermedad la tenemos todxs; se llama patriarcado.
 
Justicia patriarcal que hoy sigue llevando toga y mañana seguirá dictando sentencias; y nuevos gobernantes en nuestros pueblos y ciudades que quieren cambiar las leyes para que todo se quede «en familia», y que persiguen a las personas que luchan por la igualdad.
FeminismoAsí que una pequeña victoria a medias. Rectificación de una sentencia que nunca debió dictarse, sobre unos hechos que nunca debieron ocurrir.
Y mucha responsabilidad, la de seguir luchando, saliendo a la calle, gritando cuando haga falta, señalando con el dedo, denunciando….. y educando. Me temo que más que nunca.
 
Seguiremos luchando, nosotras sí somos manada.
Y seguiremos educando en el feminismo, cuanto más nos niegan y nos atacan, más razones nos dan para hacerlo. Mil mujeres -las contabilizadas- asesinadas ya eran una buena razón; pero ver cuántas ampollas levanta la lucha por la igualdad, hace sospechar que los privilegios que estan en juego son muchos.
 
Elena Vélez Agustín.
 

Va de barcos….

Crecí anhelando que sus majestades orientales me trajeran algún año el super barco pirata; nunca sucedió, por aquello de que las habas no daban para semejante despliegue naviero.

Los piratas eran “lo más”, super aventureros, valientes, intrépidos, se dedicaban a buscar tesoros en el mar….. ¡Un momento! ¿En el mar crecen tesoros? ¿De dónde salían esos cofres llenos de oro? Nunca me lo pregunté, simplemente los piratas molaban.

Con los años entendí que los piratas eran los malos super ilegales que saqueaban y abordaban barcos de “los buenos”, muy legales ellos, que transportaban riquezas de países conquistados al suyo, y de paso personas para salvarlas/esclavizarlas al servicio de una civilización superior.

Más mayorcita he visto como los cofres de monedas se han transformado en petróleo, gas, diamantes, coltán…. Que “los buenos” siguen trayendo de forma legal a nuestras tierras, que por lo visto siguen siendo más merecedoras de estos recursos que su lugar de origen. Los esclavos ya no hace falta traerlos en barco, desde su casa pueden hacer el trabajo y ya aquí lo comercializamos.

Y esta historia se me ocurre esta semana conectando dos noticias:

– Volver a oír palabras como “reconquistar territorios”.

– Un barco que se dedica a rescatar tesoros –bueno, en realidad personas y familias a la deriva en el mar- y que resulta ser “malo” y no puede salir del puerto porque realiza una actividad ilegal.

20-01-2019 14-13-54 Sigue leyendo

Buscando sentido al sinsentido.

Dos tristes acontecimientos nos han sacudido las entrañas esta semana. Un acuerdo internacional para devolver a la guerra a personas y familias que llevan meses huyendo de ella; y un ataque terrorista que ha arrebatado de cuajo la vida de muchas personas.

Más que tristes son crueles, ya que ambos han sido intencionados, decididos y perpetrados por personas para hacer daño a otras personas. No son los únicos actos crueles, se suceden a diario en muchos lugares del mundo y se manifiestan de formas muy diferentes. La crueldad no siempre se explicita con actos: la omisión y el consentimiento son igualmente crueles, injustos y ,a mi modo de ver, igualmente incomprensibles si tenemos en cuenta dos cuestiones:

Primera: No elegimos donde nacemos, Sigue leyendo